Regata | Todo está en juego mientras la flota se apiña hacia el Cabo Finisterre

Tras dos días de la Etapa 2 de The Ocean Race Europe and the Bay of Biscay, la flota ha cumplido con creces: tensión, agotamiento y un empate técnico. Menos de cinco millas recorren los cinco primeros barcos mientras se acercan al Cabo Finisterre, sin que ninguno pueda escapar.

Desde el reinicio frente a Ouessant ayer, donde la flota se redujo a unas pocas millas después de que los líderes se vieran bloqueados por la marea y el viento suave, la regata se ha convertido en una prueba de velocidad. El mar en calma y la brisa ligera a media no han dejado ningún escondite, solo horas de trimado, ajustes y gobierno manual a la vista de sus rivales.

"Es prácticamente una línea recta, así que se trata más de trabajar en la configuración del barco y en la velocidad que en cualquier otra cosa", dijo Francesca Clapcich, co-patrona del Team Malizia. "Esta parte podría haber sido mucho más dolorosa de lo que terminó siendo para nosotros, ¡así que lo aceptaremos!"

La batalla en cabeza sigue muy reñida. El Team Holcim PRB y el Biotherm se han intercambiado el liderato repetidamente desde ayer por la tarde, mientras que el Team Malizia, Canada Ocean Racing – Be Water Positive y el Paprec Arkéa se encuentran a tiro de piedra.

“Fue satisfactorio que nuestra elección en Ushant nos mantuviera en la competición”, dijo Sébastien Marsset (Canadá). “Después de eso, pudimos competir de verdad y mantenernos en contacto. ¡Fue muy divertido, y eso nos encanta! El ambiente a bordo es excelente; todos están muy concentrados”.

El equipo Holcim PRB le planta cara al Biotherm, que hasta ahora ha conseguido el máximo de puntos. "La flota está muy ajustada y aún queda mucho por jugar", declaró el patrón Paul Meilhat (Biotherm). "Anoche conseguimos una pequeña ventaja, pero la noche fue más dura: el viento amainó repentinamente y el Holcim PRB lo aprovechó".

“Aquí cada minuto cuenta; no hay margen de error”, dijo Rosalin Kuiper, capitana del Holcim PRB. “Biotherm es rápido, y es muy difícil seguirle el ritmo. Su barco es muy similar y también tienen la misma configuración, así que la competencia es muy reñida”.

Su compañero de equipo, Alan Roberts, describió la carrera de resistencia por el Golfo de Vizcaya como una prueba de detalle: «El viento ha estado un poco inestable, pero el barco es muy estable. Creo que es algo similar para todos. El mar está muy tranquilo. Así que pudimos experimentar con todas las variables disponibles e intentar que el barco fuera muy rápido. Lo cual es divertido cuando vas más rápido que los demás y frustrante cuando vas más lento».

En Biotherm, Amélie Grassi disfrutó de su propia batalla con Roberts, su esposo en el barco rival Holcim. «Dormí la mitad del tiempo y trabajé la otra mitad. Al principio del día, mi esposo me adelantó y al final, lo volví a superar. ¡En resumen, ha sido un día fantástico!»

Si bien los líderes han estado unidos, un equipo ha mostrado su disposición a mostrar algo diferente. Allagrande Mapei se separó de la flota esta mañana, virando antes que el resto para intentar llegar a Cabo Finisterre con viento más fuerte. El co-patrón Thomas Ruyant lo resumió: «Hay viento en todas partes excepto precisamente en Cabo Finisterre».

Por ahora, su movimiento los deja desincronizados con el grupo delantero, una apuesta arriesgada que solo podría dar sus frutos si el agujero del Cabo Finisterre atrapa a los demás. "No hay muchas opciones en la parte baja del recorrido", dijo Ruyant. "No va a ser fácil remontar. Quizás tengamos que esperar a la segunda parte de la etapa".

Hora estimada de llegada (ETA) a Porto-Matosinhos: media mañana (hora local) del miércoles.

Se espera que la flota rodee Finisterre a última hora de la tarde, tras lo cual los líderes se dirigirán a Porto-Matosinhos para el sobrevuelo de mitad de etapa. La parada en Porto-Matosinhos es inusual: los barcos cruzarán la barrera de puntos, obteniendo siete puntos para el primer puesto, seis para el segundo, etc., lo que equivale a la puntuación de la Etapa 1. Después, se les retiene durante exactamente tres horas para desembarcar antes de volver a partir desde la misma línea hacia Cartagena.

A bordo del Biotherm, actualmente [a las 12:20 UTC] empatado con el Holcim PRB, Meilhat sabe que la flota se enfrenta a un gran obstáculo antes de llegar a Porto-Matosinhos: «A medida que nos acercamos al Cabo Finisterre, probablemente habrá vientos complicados entre la costa y el TSS. Por lo tanto, podría haber muchos cambios durante las próximas horas».

Las próximas 24 horas en Porto-Matosinhos marcarán la pauta para el resto de la etapa, a medida que la flota se dirige más al sur hacia el Mediterráneo. Con los puntos en juego, el pelotón compacto y los vientos suaves en Finisterre, nadie puede permitirse el lujo de relajarse. Incluso después de la meta, habrá pocas posibilidades de respiro.

«A veces, las escalas no te ayudan a descansar, ¡porque no son lo suficientemente largas!», se rio Jack Bouttell, de Biotherm. «Pero eso es parte del juego». (F/TORE)